Toledo es el escenario perfecto para una postboda, y Antonio y Fina lo eligieron para sus fotos.

Con ellos tenemos mucha complicidad, ya que los conocemos desde que eran pequeños. Los hemos visto crecer y por el estudio han pasado en los momentos importantes de sus vidas, y su boda no iba a ser menos.

No todo es hacer fotos en la postboda, hacemos nuestras paradas y nos echamos unas risas,  por supuesto hacemos turismo entre foto y selfies.

A nosotros nos encanta hacer este tipo de sesiones pues las parejas están muchísimo más relajadas y dan mucho mas delante de la cámara.

Una fotografía siempre es especial, y más aun cuando se regala en una ocasión que quieres recordar para siempre.

Antoñita ha querido regalarle a Juan esta Lovesession por San Valentin, que recordaran  toda la vida no solo por el momento, también por la experiencia de hacerse un tipo de sesión así.