Fátima, sesión boudoir
Hacer una sesión fotográfica no se queda sólo en una simple relación comercial, es algo más. Una sesión lleva muchos ratitos de hablar con la persona que quiere hacerse las fotos, saber para que es, por qué se las hace…… para así poder sacar todo lo mejor de esa persona y plasmarla en una fotos que se quedarán para el recuerdo.
Se construye una gran complicidad que hace que la persona esté tranquila y que el resultado sea totalmente de su agrado.
Las sesiones sean de lo que sean, suelen ser super divertidas……. nos lo pasamos muy bien todos, ya que como siempre digo, somos un equipo y eso juega en favor del resultado final.
Aquí os dejo con Fátima, que tenía muy claro que quería hacerse una sesión Boudoir, pero a la vez le tenía un poquito de miedo…….eso de posar lo llevaba bastante regular, como todo el mundo……. y decidimos hacer esta primera parte en su casa, así se sentiría más tranquila. Y hechas las primeras, todo fue genial y tan sólo quedó que disfrutara de su sesión.
Estamos muy contentos de como han quedado estas fotografías y por eso, queremos que disfrutéis de ellas tanto como nosotros.